El juez Fredy Orellana otorgó arresto domiciliario a Angelita Martínez, la sindicalista del TSE, procesada en el caso “Corrupción Semilla”, debido a su delicado estado de salud. La decisión se basó en un informe del Inacif que recomienda atención médica especializada por riesgo de cáncer de ovario.
Por Alexander Valdéz
El juez Fredy Orellana, titular del Juzgado Séptimo de Primera Instancia Penal, autorizó que Angelita Martínez, trabajadora sindical del Tribunal Supremo Electoral (TSE) implicada en el caso denominado “Corrupción Semilla”, salga de la prisión y continúe su proceso bajo arresto domiciliario por motivos de salud.
Su abogado defensor presentó una solicitud de medidas sustitutivas, señalando que el estado físico de Martínez se ha deteriorado y no puede continuar encarcelada. En su argumentación mencionó un informe del Instituto Nacional de Ciencias Forenses (Inacif) que recomendó garantizarle acceso a atención médica especializada.
Los abogados indicaron que su cliente presenta un cuadro clínico delicado, con riesgo de desarrollar cáncer de ovario, por lo que requiere tratamientos preventivos y de seguimiento constante.
En la diligencia, la Fiscalía Especial Contra la Impunidad (FECI) no se opuso a que Angelita Martínez recibiera medidas sustitutivas, aunque advirtió que aún persisten riesgos procesales. La fiscal Leonor Morales dijo que, en este caso, debe prevalecer la atención a las necesidades médicas de la procesada y la garantía de su derecho a la salud.
Martínez tendrá prohibido salir del país sin autorización judicial y no puede tener comunicación con magistrados del Tribunal Supremo Electoral.
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Señalada de un delito
Martínez es acusada del delito de abuso de autoridad de manera continuada. La fiscalía la señala de haber emitido órdenes ilegales a trabajadores del TSE, documentadas mediante grabaciones y testimonios. Uno de ellos, identificado como Testigo A, aseguró que la sindicalista amenazó a empleados de la Unidad de Archivo para que se afiliasen a su sindicato, bajo advertencia de represalias si mantenían contacto con trabajadores críticos de la magistrada presidenta en funciones, Blanca Alfaro.
Este es el mismo proceso con el que la FECI y el juez Orellana buscaron anular los resultados electorales del 2023. Han logrado la cancelación del partido Movimiento Semilla y que algunos de sus exintegrantes como Ligia Hernández, acepten su culpabilidad y sean condenados por la vía de aceptación de cargos (un procedimiento con el que no se necesita investigación).
Por ahora, tres procesados no han cedido a ese procedimiento y fueron enviados a un debate que estará a cargo de un tribunal unipersonal; en el que la FECI debe acreditar los hechos de su investigación.
