Walter Mazariegos y sus allegados buscan perpetuar su poder en la USAC

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Créditos: Archivo PC
Tiempo de lectura: 4 minutos

 

Walter Mazariegos se niega a convocar a elecciones, pero ha impulsado modificaciones al Reglamento Electoral Universitario de la Universidad de San Carlos de Guatemala (USAC), cambios que fortalecen su control y la integración del Consejo Superior Universitario (CSU). Estas reformas, aprobadas el 28 de marzo, reducen la autonomía de los órganos electorales y permiten que el rector y sus allegados permanezca en el cargo indefinidamente, generando preocupación en la comunidad universitaria.

Por Prensa Comunitaria

El pasado viernes 28 de marzo, la comunidad estudiantil de la Universidad de San Carlos de Guatemala (USAC) esperaba que el Consejo Superior Universitario (CSU) convocara a elecciones para renovar a los miembros cuyo período ya ha vencido, en cumplimiento de un amparo que quedó en firme el pasado 12 de marzo de 2025.

Sin embargo, en la sesión del CSU no se incluyó la convocatoria, sorprendiendo en cambio con modificaciones al Reglamento Electoral Universitario, impulsadas por el actual rector Walter Mazariegos. Estos cambios centralizan el control de la USAC y permite la continuidad indefinida de la gestión de Mazariegos y sus allegados.

Modificaciones impulsadas por Mazariegos

Las reformas fueron elaboradas por la Dirección de Asuntos Jurídicos a solicitud de Mazariegos el pasado 5 de marzo. Según el oficio enviado a esa dirección, se ordenó una revisión del Reglamento de Elecciones con el fin de ajustarlo a las “necesidades institucionales” de la universidad.

Entre los cambios más polémicos se encuentra la adición del artículo 2 Bis, que establece que toda autoridad universitaria electa seguirá en funciones hasta que su reemplazo asuma el cargo. Esto otorga a Mazariegos la posibilidad de mantenerse indefinidamente en el poder en caso de que no se realicen elecciones o no se permita la toma de posesión de su sucesor. La disposición no aplica a los decanos, quienes, según la Ley Orgánica, deben ser sustituidos por el Vocal I o Vocal II una vez vencido su período.

Otros cambios clave en el reglamento

Centralización del poder: El artículo 28 establece que la certificación de los catedráticos titulares con derecho a elegir y ser electos quedará en manos de la División de Administración de Recursos Humanos y no de las Unidades Académicas, restando autonomía a estas últimas.

Control sobre las elecciones: Se elimina el Tribunal Electoral Universitario (artículo 70), que tenía la función de conocer apelaciones en decisiones definitivas de la Junta Electoral Universitaria. Ahora, la única autoridad con poder sobre elecciones es el CSU, presidido por Mazariegos.

Modificación del quórum: El artículo 15 reduce el número de votos necesarios para la elección de rector y decanos, pasando de dos terceras partes a la mitad más uno del total de electores.

Restricciones para opositores: Se adiciona el artículo 2 quinquies, que exige que los profesionales incorporados a la USAC estén en pleno goce de sus derechos civiles y políticos en Guatemala. Esta medida podría utilizarse para impedir la participación de opositores a través de la criminalización, como ocurrió en el caso Toma USAC Botín Político.

Concentración de poder en el CSU

Las modificaciones refuerzan el control del CSU sobre los procesos electorales, reduciendo las atribuciones de la Junta Electoral Universitaria y trasladando la potestad de aprobar o anular elecciones únicamente al Consejo Superior Universitario (artículos 65 y 67).

El artículo 75 limita la función de la Junta Electoral Universitaria a emitir pronunciamientos técnicos, dejando en manos del CSU la decisión final sobre posibles irregularidades. Además, la derogación del artículo 76 elimina cualquier instancia de apelación, consolidando el control absoluto sobre los comicios universitarios.

Implicaciones para la comunidad universitaria

Estas modificaciones han generado preocupación en la comunidad universitaria, ya que otorgan a Mazariegos y al CSU un control absoluto sobre el proceso electoral en la USAC. La eliminación de mecanismos de apelación, la reducción del quórum y la posibilidad de mantenerse en el cargo indefinidamente sugieren una estrategia para consolidar un gobierno universitario sin contrapesos democráticos.

La falta de convocatoria a elecciones y la aprobación de estas reformas ponen en riesgo la autonomía y la legitimidad de la USAC, generando una crisis institucional que podría afectar la participación estudiantil, académica y profesional en la toma de decisiones dentro de la universidad, señalan fuentes académicas.

Sobre la situación de las elecciones en la USAC

Desde la imposición de Walter Mazariegos en la rectoría, se ha evitado la convocatoria a elecciones. Sin embargo, diversas acciones legales y amparos han obligado a realizar ciertos procesos electorales.

El CSU está compuesto por 41 miembros, de los cuales 37 tienen su período vencido. Hasta la fecha, se han aprobado 9 elecciones, de las cuales 4 ya se llevaron a cabo: docentes y profesionales de Veterinaria, profesionales de Arquitectura y decano de Humanidades. Otras 4 están en proceso: docentes de Arquitectura, decano de Derecho, decano de Ingeniería y estudiantes de Medicina. Aún no se ha convocado la elección de los profesionales del CANG.

A pesar de que en algunos cargos ya se han elegido nuevas autoridades, existe el riesgo de impugnaciones y otras maniobras legales para evitar que los electos asuman sus puestos. Mientras tanto, los actuales miembros del CSU continúan ejerciendo sus funciones, prolongando una crisis institucional en la USAC.

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